Qué hago para sentirme mejor.

A veces se trata de darle al cuerpo lo que necesita. Estar atentos a la sensación de cada parte del cuerpo. ¿Qué nos va diciendo? ¿Cómo nos sentimos físicamente? Tomar conciencia de la sensación y la existencia del cuerpo. Podemos frotar alguna parte del cuerpo que necesite algo de tonicidad o elasticidad. El masaje ayuda a limpiar y drenar las toxinas acumuladas en las fibras musculares. Asimismo ese drenaje favorece la recuperación muscular ya que provee a los músculos de la energía y nutrientes necesarios mediante los sistemas circulatorios sanguíneo y linfático. También se pueden estirar las fibras musculares en forma suave para ir templando los músculos y ablandando tendones. Recordar que cuando algo duele es indicativo de que hay algún tipo de energía bloqueada, que se puede destrabar con los evidentes beneficios que ello trae. En este punto hay que tener cuidado de que no haya alguna lesión porque esto podría agravarla. Beber algo de agua natural, para absorberla fácilmente, facilita la digestión y el funcionamiento renal, que purifica el cuerpo. Masajear las manos o los pies también ayuda a la relajación y que nos sintamos mejor. De esta forma podemos descubrir muy fácilmente qué hacer en casa para mejorar la calidad de nuestras vidas. Un cuerpo equilibrado y que se siente bien es el recipiente ideal para una vida feliz.